Catulo, XI

En vista de la sintaxis compleja de este poema y de la  máxima fidelidad hacia el latín que esta vez he intentado alcanzar, conviene que ante todo haga una serie de aclaraciones. Las condicionales que hay desde el segundo verso al doceavo dependen, a mi entender, de la aposición <<comites Catulli>> (acompañantes de Catulo) y no, como otros consideran, de <<parati simul temptare>> (preparados para al mismo tiempo tentar todas estas cosas...), que aparece mucho más abajo. Luego, en el decimotercero verso de mi traducción, Catulo vuelve a dirigirse a Furio y Aurelio y es entonces cuando nos encontramos el verbo principal, <<nuntiatis>> (anunciad). En definitiva, sólo a mediados del poema logramos entender cuál es el propósito del poeta, lo cual dificulta su lectura tanto en latín como en español. Por último -ahora me dirijo especialmente a los de Clásicas-, me gustaría resaltar la fuerza del siguiente verso y su sintaxis ambigua, que he intentado reflejar en mi traducción manteniendo el orden de palabras: <<[cum suis (...) moechis] quos simul complexa tenet trecentos>>. En efecto, parece que todo va con todo: que <<simul>> afecta tanto a <<complexa>> como a <<tenet>>; por otra parte, no está claro si <<quos>> modifica a las dos formas verbales y <<trecentos>> es predicativo de él, o si por el contrario sólo a <<complexa>> o a <<tenet>>. Y sin intención de liar más el asunto, aquí os dejo el poema:

Furio y Aurelio, acompañantes de Catulo
si en los extremos de la India penetrara,
donde el litoral a lo lejos es tundido
por la resonante onda del Oriente,
o si en los hircanos  o en los árabes tiernos, 
o  si en los sagas o en los flecheros partos,
o si en las profundidades que el Nilo
siete veces gémino de sí colora,
o si más allá de los altos Alpes marchara,
viendo los monumentos del gran César,
el gálico Rin, y los horribles y
últimos britanos;
preparados para al mismo tiempo tentar
todas estas cosas, cualesquiera que presente
la voluntad de los dioses,
anunciadle a mi muchacha
pocas y no buenas palabras.
Que viva y esté bien con sus amantes,
a los que a la vez abrazada a trescientos sostiene
a ninguno amando de verdad, pero de igual forma 
las costillas de todos rompiendo;
y que no se vuelva, como antes, hacia mi amor,
que por la culpa de aquella ha caído como la flor
del borde del prado, después de ser tocada
por el arado que le pasa por delante.


Furi et Aureli comites Catulli,
sive in extremos penetrabit Indos,
litus ut longe resonante Eoa
tunditur unda,
sive in Hyrcanos Arabesve molles,
seu Sagas sagittiferosve Parthos,
sive quae septemgeminus colorat
aequora Nilus,
sive trans altas gradietur Alpes,
Caesaris visens monimenta magni,
Gallicum Rhenum horribile aequor ulti-
mosque Britannos,
omnia haec, quaecumque feret voluntas
caelitum, temptare simul parati,
pauca nuntiate meae puellae
non bona dicta.
cum suis vivat valeatque moechis,
quos simul complexa tenet trecentos,
nullum amans vere, sed identidem omnium
ilia rumpens;
nec meum respectet, ut ante, amorem,
qui illius culpa cecidit velut prati
ultimi flos, praetereunte postquam
tactus aratro est.